La bodega argentina recibió con gozo el destaque que les hiciera la publicación Drinks International y lo celebró, gracias a la tecnología, con clientes y amigos de todo el mundo
Las buenas noticias se reciben siempre con entusiasmo, pero cuando estas llegan en días difíciles la alegría que provocan es mayor. Esa bocanada de aire llegó a principios de mes a Mendoza, Argentina, para arropar a la familia de la bodega Catena Zapata. El primero de abril la revista Drinks International, los distingue con el reconocimiento de “la Marca de Vinos más Admirada del Mundo de 2020”, un reconocimiento sin precedente para el país latinoamericano.
La calidad, la autenticidad y la presencia, son algunos de los aspectos que evalúan los encuestados para decantarse por uno u otro producto.
En charla vía Zoom el enólogo de la casa, Alejandro Vigil, nos cuenta cómo Catena Zapata celebra este premio y la forma en que vive la industria vinícola la pandemia.
“No pudo llegar en mejor momento. Nos levantó el ánimo tremendamente. En medio de todo esto recibir una noticia como esta es muy gratificante. Estábamos en medio del recogido de la cosecha con máscaras y guantes cuando nos avisaron. Los vinos se consideran alimento así que pudimos seguir trabajando, naturalmente tomando las medidas necesarias de seguridad. Así que pudimos llegar a recoger e introducir la uva”.
Con un brindis virtual la casa agradeció a todos los que los apoyaron e hicieron que Catena Zapata hiciera historia al ser la primera bodega argentina en recibir el galardón.
“Nos alegra porque visibiliza a la región y a Argentina, que lleva más de 400 años produciendo vinos de alta calidad. Somos un país con una tradición vinícola robusta y esto nos sitúa entre los grandes productores de vino del mundo. Detrás de nosotros como marca admirada estaba Penfolds, imagínate todavía nos cuesta visualizar la magnitud de esto. Hemos trabajado para llegar hasta aquí y etiquetas del viñedo Adrianna han obtenido puntajes de 100 en revistas especializadas, pero aun así siempre es agradable que se reconozca el buen trabajo”.
Vigil asegura que los factores para el éxito que hoy degustan recaen en tres aspectos; tradición familiar, consistencia y esfuerzo. El rescate la variedad Malbec es una de las principales aportaciones de Nicolás Catena Zapata, fundador de la casa en 1902. A este visionario también se le atribuye el descubrimiento de “terroirs” en lugares de altura extrema.
“Hay una historia detrás de Catena Zapata. Su fundador Nicolás Catena tenía visión y desde la fundación de la casa trazó un plan de desarrollo a largo plazo. Aquí hay una conjunción de trabajo, tesón e historia. Tenemos gente que lleva toda la vida trabajando para la casa y eso provoca un sentido de pertenencia y orgullo. Catena Zapata está ahora en manos de la cuarta generación y es que esto es una familia y eso permea el trabajo que hacemos”.
Vigil lleva 18 años trabajando como enólogo para la familia y agradece la independencia y voto de confianza que ha recibido desde el primer instante que pisó los viñedos.
“Llegué en el 2002 y desde ese momento he tenido libertad absoluta. Me han permitido crear proyectos especiales como el área de investigación y desarrollo Catena Institute que nos está ayudando a ampliar las fronteras del conocimiento vinícola. Es un proyecto que busca seguir mejorando la calidad de nuestros vinos”.
Argentina ante la pandemia
“El gobierno actuó rápido y eso ha sido una medida muy eficaz para controlar la propagación. Aunque llevamos 32 días de cuarentena nosotros hemos podido seguir trabajando, siguiendo normas y prácticas dictadas por el gobierno, pero hay algunos sectores que se han afectado grandemente. Seguimos vendiendo en mercados y ‘on-line’, pero la distribución se ha afectado porque los movimientos son restrictos. Además, la aduana está cerrada por lo que la exportación está paralizada”.
La inventiva es, según afirma el experto, la única manera de paliar la situación que presume tendrá gran impacto en la industria del vino y la hostelería.
“La actividad ha buscado cómo reinventarse. Creo que el mundo del vino se adaptará, de hecho, ha actuado con rapidez. Hemos hecho degustaciones virtuales que nos han ayudado a mantener viva la marca. No obstante, creo que el reinicio del turismo y la actividad en los restaurantes va a ser lento en lo que aparece una vacuna para combatir el COVID-19”.
Alejandro Vigil, además de enólogo, es propietario de seis restaurantes y la preocupación de cual será el futuro de estos lo inquieta.
“Me estoy preparando para un reinicio muy lento. En lo que la gente pierde el miedo y aparece una vacuna percibo que la comida para llevar será lo que predomine. Más comida para que la gente monte el plato en su casa. Está visto que el distanciamiento social va a continuar y esto hará que todo proceso de normalización sea lento y paulatino hasta que un tratamiento o una vacuna aparezca. No nos queda otra que seguir rediseñándonos. Yo creo que esto es un fenómeno profundo y que esto se va a estudiar en el futuro. Ahora bien, creo que los cambios importantes traen cambios espirituales. Lo que estamos viviendo va a ser uno de esos momentos trascendentales en los que la unidad y solidaridad traerá un cambio positivo. Se redefinirá la manera en que vivimos y nos comportamos y eso será positivo”.
El público de Catena Zapata
Festejar con amigos, distribuidores y clientes era parte de la magia que suponía un evento como este de ser nombrada la Marca de Vinos más Admirada del Mundo de 2020.
“Era importante que ellos fueran parte de la celebración. Es gracias a ellos que nos reconocieron. Nuestro mercado es amplio así que procuramos brindar con todos”.
Catena Zapata tiene entre sus mejores clientes a países de Asia, Europa y Latinoamérica que optan por la alta gama de la casa.
“En Estados Unidos lo que más se vende es el vino más económico, pero China, Inglaterra, México lo que buscan es un vino más ‘high-end’ y vino de parcela. China especialmente es un mercado de vinos de alta categoría y Premium”.
